23 de abril de 2011

Este jueves un relato:"la radio de la noche!"







Noches de verano

Recuerdo a mi madre decir __Ceci, venga ayúdame__ pues todas las noches, terminada la cena, teníamos que mover la mersa y las sillas; unas vez hecho sitio, traíamos el colchón de la cama de ella y lo poníamos en el suelo, delante de las puertas de la terraza abierta de par en par, pues ahí es donde hacia mas fresquito, en esas calurosas noches sevillanas de verano.
Esa liturgia se repetía todas las noches, unas sabanas blancas muy finitas y en la almohada entre las dos, la radio.
Se veían las estrellas, olía a mi madre y escuchábamos, en Radio Nacional de España, el programa del Loco De La Colina,
Recuerdo su sintonía, era ”Shine On You Crazy Diamond” de Pink Floyd; era un programa de entrevistas y con unos silencios, provocados por el presentador, Jesús Quintero. Era una radio intimista, pausada, pero a la vez energía y contestataria… diferente.
 Recuerdo sus reflexiones, que bien hablaba con esa voz tan radiofónica, yo también pensaba, lo que el tan bien decía; corrían los 80.
Yo tenía 20 años y dormía con mi madre, a su lado.



7 de abril de 2011

Este jueves un relato, a dos manos: Las Doce Tinajas



Las Doce Tinajas.

En 1910, llego un señor de la capital, se instalo en la fonda del pueblo, quería contratar trabajadores, para rehabilitar una hacienda situada en los limites del pueblo, en la cual hacia muchísimo tiempo no vivía nadie. Un día Limpiaban  los trabajadores con la intención de plantar un seto junto a la pared trasera de la casa. Pegadas a la pared enterradas y tumbadas a poca profundidad, hallaron doce tinajas con un tapón de corcho sellando la boca con cera amarillenta.
 La consternación invadió a quienes las abrieron porque cada una contenía un esqueleto de recién nacido. La voz se corrió al igual que el espanto de los vecinos. Los más ancianos comentaron que allí vivió una mujer llamada María con su hermano, recordaron  que María pasaba mucho tiempo encerrada en casa y que tanto encierro sólo podía demostrar los ocultos embarazos de la mujer. María vivía sola con su hermano mayor. Los hijos debían ser fruto del incesto.
Las obras se paralizaron de inmediato, el señor encargado de la obra se marcho y misteriosamente la casa se incendio.
Dicen las malas lenguas que una maldición cayó sobre la casa, la mansión de las doce tinajas, como la llaman todavía por lo que allí sucedió
En el año 2009, Pascual compró una caja que contenía viejas fotografías en una tienda de anticuario. Cuando abrió la caja, su sorpresa fue macabra, doce de las veinte fotografías que contenía,  eran de una mismas mujer, la cual sostenía en sus brazos un bebe, pero ninguno de los doce bebes, tenían cara.