Son muchas las fiestas que tenemos en Sevilla, aquí por ná se monta un jolgorio, pero la mundialmente conocida es la Feria de Abril, que se celebra exactamente dos semanas después de Semana Santa; que por cierto la que se monta también es menuda, esta da para un buen relato, pero eso será otro día.
Bajo el beneplácito de la reina Isabel II, se le concede a Sevilla el privilegio de feria ganadera, esto fue en marzo de 1847 y un mes más tarde se celebro la primera feria. Pero esto no parte de un sevillano, la idea es de un vasco José María de Ybarra y un catalán Narciso Bonaplata, mire usted qué casualidad; lo que está claro es, que el ambiente festivo de: cante, baile, comida, bebida, alegría, sabor, olor, luz, color y ruido, se lo pusimos las sevillanas y los sevillanos.
La Feria de Abril, en sus 165 años de vida ha tenido dos emplazamientos de 1847-1973, en el Prado de San Sebastián, esta zona fue quedando pequeña y a la vez muy céntrica, por lo tanto su nuevo emplazamiento se busco más a las afueras, desde entonces se pone en Los Remedios, cruzando el Guadalquivir, en
la orilla de Triana.
Un tópico que en parte tiene razón, es la privacidad de las casetas. Este año rondaran las 1.200 casetas, pues solo se ponen las que el Ayuntamiento autorice. La caseta, es la casa del sevillano en la feria, donde recibe a sus amigos y familiares; como poner una caseta es carísimo, la norma es que un grupo afín de personas (familiares, amigos, empresas de trabajo, corporaciones, peñas, hermandades cofrades, clubes, etc.), que aúnan dinero, trabajo y esfuerzos, con muchísimas ganas de vivir esta experiencia, la cual suelen repetir años tras años, de generación en generación.
Una vez explicado el concepto de caseta, comprenderéis el carácter de privacidad. También están las casetas públicas que son muchísimas (partidos políticos, sindicatos, las de distrito, etc.). Pero lo importante cuando visitas un evento digamos: Las Fallas de Valencia, Los Sanfermines en Pamplona, La Verbena de San Isidro en Madrid, Los Carnavales de Cádiz, por nombrar algunos; pero lo esencial es ir con gente de la zona, es de la única forma que vives la fiesta desde dentro.
La portada de Feria, es otra particularidad que cada año cambia, es la entrada al recinto ferial, que por supuesto tiene su nombre: “El Real De La Feria”.
La Feria siempre comienza un martes y termina el domingo siguiente, sin olvidar “El Lunes del Pescaito”; es cuando se inaugura la caseta, con la cena donde no puede faltar el pescaito frito, las gambas, el jamón, el fino, la manzanilla y un sin fin de exquisiteces, con las cuales entretener al personal, hasta las 12 en punto de la noche, que con el “Alumbrao”, como definimos el encendido de las cientos de miles de bombillas, que cubren la portada y alumbran las calles del Real.
En este mágico marco, durante 6 días, más de un millón de personas disfrutaran del cante y baile por sevillanas, que no cesara, pues la feria no se cierra. Y de todo esto, no quedara nada en pie, pues toda esta infraestructura desaparecerá.
Esto es una mera semblanza, pues no hay palabras suficientes para transmitir este fenómeno social.
Como habréis observado las fotos son de esta que os cuenta, que años aquellos, cuando las fotos eran en blanco y negro.
Para mas ferias encá Manuel