CURRIQUI
Llego el día 3 de este pasado junio, fue sin avisar; entro en nuestras vidas sin decir palabra, eso si, llenándolas de amor y ternura. Le llamamos Curriqui (el o la).
Le dimos nido, comida cada hora y mimos muchos mimos.
Curriqui a cambio nos daba alegrías, preocupaciones y sobretodo risas, con sus Pio!! Pio!!.
Pio!! Pio!! Pio!! Pio!!.
Curriqui nos dejo el día 12 del mismo mes, sobre las 13:45 horas. Nos quedamos con el alma rota, los ojos rojos, la nariz congestionada y un monto de proyecto por realizar juntos los tres.
Pio!! Pio!! Pio!! Pio!!.
Fue un pajarito feliz, no nos cabe duda.
Que la tierra te sea leve, Curriqui.
Curruqui...pio, pio, "pequeña muerte" para pequeño pajarito.
ResponderEliminar!Cuanta tristeza! lo lamento, os dejó un cántico dulce y agradecido por vuestro cariño.
Besito Atalanta.
Varias veces hemos tratado de sacar adelante pajaritos caídos del nido y han durado más o menos, pero nunca uno ha sobrevivido. Esa incapacidad de vivir en cautividad o semi cautividad, aunque sea con cariño, es lo que me fascina de ellos.
ResponderEliminarUn beso, amiga.
Cuidar un ser tan pequeño y desvalido con la ilusión de que salga adelante y no conseguirlo no debe crear una sensación no muy agradable. He leído a Juan Carlos y coincido con él, suele pasar...
ResponderEliminarBesos
curriquiiiiiiiii......hermoso hermoso hermosos relato.... te cuento una mia... me pasó exactamente igual, se llamaba pipina en nuestro caso! jeje... nos acompañaba caminando al quiosco de la esquina cuando ibamos a comprar algo... era un animalito hermoso. me conmocionó tu historia, porque cuando parten, de hecho felices, uno se queda pensando en ellos... besos amiga!
ResponderEliminarDebe ser muy difícil conseguir que sobreviva un pájaro tan pequeño!
ResponderEliminarPero bueno, al menos fue bueno el tiempo que duró.
Un abrazo
Debe ser por eso que no puedo tener animales en casa. Ni te cuento la que monté hará unos 10 años cuando se me murió Pericles, un pez! madre mía qué dramón! El último. "Sababó", que dice tu pequeño Julio (Se acabó)!!!
ResponderEliminarbesito.
Que maravilla!!! Que ternura!!! Me encantaron las imágenes, que placer haber podido ser parte de esto.
ResponderEliminarMaravilloso tu enfoque, paradojicamente lleno de vida!!!
Un beso.
Pequeña muerte, pero sólo si atendemos al tamaño del pajarillo. Sin embargo, esa muerte es proporcionalmente inversa a la pena con la que vez consumirse la vida de ese ser al que con tanto mimo habeis intentado cuidar. Siento esa pérdida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues si Natália nos dejo muy tristes, gracias por el ratito.
ResponderEliminarBesos alados.
Si eso nos han comentado varias personas, es difícil sacarlos adelante.
ResponderEliminarGracias por tu apoyo Juan Carlos.
Besos alados
Si tienes toda razón Nieves, cuanto lo echamos de menos, los ojos se me iban para el lugar donde lo enterramos en el camping.
ResponderEliminarGracias por la compaña vecina.
Besos alados
Claro Gastón, nunca olvidaremos una cosita tan chica, siento en el alma lo de tu Pipina.
ResponderEliminarGracias por tu comprensión.
Besos alados
Neo, dices lo mismo que ni contrario, superseguro que fue muy feliz.
ResponderEliminarGracias por tus palabras.
Besos alados
Verónica, otra cosa mas en común, yo tampoco me atrevo a tener otro animal, pues desde que murió mi Ziru del alma, no soy capaz de dar ese paso, pues ya se lo mal que se pasa.
ResponderEliminarEsto sababó Compi.
Besos alados
Sindel, tu lo haz dicho que ternura; no se porque, pero lo dimos por machote, y bien chulo que era el tío, bueno en las fotos se ve.
ResponderEliminarMe agradan mucho tus visitas.
Besos alados
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarClaro Pepe, claro que si, nos quedamos con la incertidumbre, de en que nos abríamos equivocado, pero lo mal o lo bien que hicimos, sin duda que fue con mucho amor.
ResponderEliminarGracias por tu sensibilidad.
Besos alados
Qué bonito y que pena. Esto es una gran muerte. A veces es difícil tirar para adelante estos animalitos.
ResponderEliminarUn beso
Son tan delicados! Muchas veces caen entre las plantas y estoy tentada de ayudarles a comer, pero sé que al final acaban muriendo, así que los coloco en la azotea en un sitio cómodo y espero que su madre lo venga a buscar. Y suele venir. Un beso.
ResponderEliminarAyyysss !!!
ResponderEliminarsi que me dio penita...
Carmen, que razón tienen tus palabras, nos dejo muy tristes.
ResponderEliminarGracias por este ratito.
Besos alados
Leonor, todos/as me dicen lo mismo, que es muy difícil sacarlos adelante, nosotros hicimos lo que pudimos.
ResponderEliminarGracias por tu visita.
Besos alados
Hola Maria!!!
ResponderEliminarMe alegra conocerte y si la verdad fue una gran pena.
Besos alados
Si, me acorde de cuando era pequeña, pues también encontre un gorrioncillo botado a las orillas de un árbol en el jardín... y sucedio exactamente lo mismo, pues por ello me dio mucha tristeza, tan pequeñitos pero con tanta vida para ofrecer...
ResponderEliminarPajarito chiquito dejando un hueco grande, mimos si que se llevo antes de su pequeña muerte.
ResponderEliminarBesos Atalanta.
Hola atalanta1 pasaba a saludarte y decirte que descubrí que tu comentario preguntándome sobre la foto para la tarjeta de este años había quedado marcado como spam. ya lo subsané y te digo que cualquier foto más o menos actualizada me viene bien, si es con buena definición, mejor. si es de medio cuerpo o cuerpo entero, corre por tu cuenta1
ResponderEliminarSaludos y gracias por tu interés en participar.